Es un uso completamente correcto. Si consultamos la definición en cualquier diccionario del español, encontramos que socorrista es la ‘persona especialmente adiestrada para prestar socorro en caso de accidente’.

En España se ha especializado su uso de manera que solo se denomina socorrista a la persona que se ocupa de prestar servicios de vigilancia y socorro en las piscinas de uso público, mientras que se utilizan otras expresiones (miembros de equipos/de unidades de salvamento/rescate, efectivos de rescate...) para referirse a las personas que socorren en los siniestros y accidentes.