Una obra literaria, o científica, es decir, un solo título pero que consta de varios tomos ¿cómo es más correcto referirse a estos, como tomo o como volumen?
Tal como recoge el Diccionario de bibliología y ciencias afines, de José Martínez de Sousa, un tomo es una unidad conceptual, mientras que un volumen es una unidad física, independientemente del contenido. Una historia universal, por ejemplo, puede dividirse en tomos (Edad Antigua, Edad Media, Edad Moderna…), y cada uno de esos tomos puede constar de uno o más volúmenes de equis páginas. Estas definiciones se corresponden con el uso terminológico asentado internacionalmente en biblioteconomía.
Por tanto, si los elementos constituyen unidades temáticas, se hablará de tomos; si no, de volúmenes.