El phishing alude a una técnica fraudulenta en internet con la que se pretender captar datos privados de los usuarios: nombres de acceso a cuentas bancarias, contraseñas, datos de las tarjetas de crédito, etc. Para obtener esta información se recurre a la falsificación de páginas que el usuario conoce, se duplican y se pide que se introduzcan en ella los datos confidenciales que se quiere obtener.
No existe una traducción asentada en español por lo que se recomienda escribir este anglicismo en cursiva. Además, puede optarse por alternativas más genéricas como delito informático, mensaje electrónico fraudulento, ciberestafa, fraude por internet…