Aunque los cometas se identifican más precisamente con un código (en este caso C/2012 S1), lo normal es que se nombren por su descubridor o descubridores (como cometa Halley o cometa Hale-Bopp). En este caso, el descubrimiento fue hecho por un grupo de científicos de una entidad cuya sigla es ISON (que corresponde a International Scientific Optical Network), por lo que lo apropiado es escribirlo íntegramente en mayúsculas. No hace falta ningún resalte adicional, como comillas o cursiva.