Su género varía en función de su significado. Cuando significa 'conjunto homogéneo de cosas alargadas atadas por el centro' y 'conjunto de rayos luminosos que emanan de un mismo punto', es de género masculino. Pero cuando significa 'cara de una cosa habitualmente más visible o destinada a ser vista' y 'tropa formada' es femenino. Hablamos, por tanto, de un haz de leña o un haz de luz, pero de el haz blanca de la luna y de las haces de caballería.