revulsivo repulsivo, uso adecuado

Foto: © Archivo EFE / José Manuel Vidal

El término adecuado para hablar de lo que genera reacciones bruscas es revulsivo, no repulsivo, que es aquello que causa repulsión o repele.

En los medios de comunicación pueden encontrarse ejemplos como «Supondrá un repulsivo para el ritmo de vacunación en España», «El alumbrado navideño se mantiene como un repulsivo para que las ventas se mantengan» o «Abrió sus puertas en 2002 y fue un repulsivo para los pueblos vecinos».

El Diccionario de la lengua española define revulsivo como aquello ‘que provoca una reacción brusca, generalmente con efectos beneficiosos’. Por su parte, repulsivo es todo lo que provoca repulsión o repele. Por ello, no es conveniente confundir un término con el otro, de manera que en los ejemplos anteriores lo adecuado habría sido «Supondrá un revulsivo para el ritmo de vacunación en España», «El alumbrado navideño se mantiene como un revulsivo para que las ventas se mantengan» y «Abrió sus puertas en 2002 y fue un revulsivo para los pueblos vecinos».

Hay que tener en cuenta que repulsivo sí es la palabra indicada en estas dos frases, que ejemplifican sendos significados del adjetivo (‘que repele’ y ‘que repugna’): «Este tipo de energía tiene un efecto repulsivo contra la atracción sobre la materia» y «Produce un fuerte olor que es placentero para algunas personas y repulsivo para otras».

Por otra parte, se recuerda que, cuando se quiere nombrar un producto o una sustancia que repele, lo recomendable es emplear el sustantivo repelente, no repulsivo, como en «Las mariposas sirven también de repelente para hormigas y pulgones» y «Es un repelente para los insectos».

Valora esta recomendación

1 Star2 Stars3 Stars4 Stars5 Stars

Últimas recomendaciones

¡Hola!

¿Has buscado tu duda en nuestra web?

Si no la encuentras, rellena este formulario:

Los campos con * son obligatorios