Palabras como pinchazo, chuponeo y chuzada, que aluden a las escuchas telefónicas, se pueden escribir sin necesidad de destacarlas con cursivas ni comillas, pues son términos ya asentados en el uso general en sus respectivos países.
Aunque estas voces son de origen coloquial, han pasado a la lengua general y se usan con toda normalidad en los medios de comunicación, como en «La Fiscalía investigará presuntas ‘chuzadas’ a magistrados de la Corte Constitucional», «Un ‘pinchazo’ telefónico entre dos investigados en el caso salpica al ministro» o «Precauciones contra el ‘chuponeo’».
Del verbo pinchar, que el Diccionario de la lengua española define como ‘intervenir una línea o una comunicación telefónica’, se ha creado el sustantivo pinchazo para aludir a la intervención telefónica. Las formas chuponeo y chuzada, por su parte, derivan de chuponear y chuzar, voces que el Diccionario de americanismos recoge con los sentidos de ‘interceptar una línea o una llamada telefónica’ y ‘manipular una línea telefónica para espiar las conversaciones que se realicen a través de ella’, respectivamente. Mientras que la primera se usa en Perú, la segunda es propia de Colombia.
Ni los verbos ni los sustantivos necesitan destacado, por lo que en los ejemplos iniciales se podría haber prescindido de las comillas: «La Fiscalía investigará presuntas chuzadas a magistrados de la Corte Constitucional», «Un pinchazo telefónico entre dos investigados en el caso salpica al ministro» y «Precauciones contra el chuponeo».