Statu quo, y no status quo,es la grafía correcta de la expresión latina empleada para referirse al ‘estado de un asunto o cuestión en un momento determinado’.
En consecuencia, en frases como «Algunos analistas piensan que la capacidad de influencia china sobre Pionyang es limitada y que tampoco tiene mucho interés en modificar el status quo en la península» o «Sus perspectivas radicales y de extrema derecha rompieron el molde de la política británica, cambiando el status quo de manera tan contundente…», lo apropiado habría sido emplear la forma statu quo.
Además, tal como indica el Diccionario panhispánico de dudas, es invariable en plural (los statu quo) y se pronuncia [estátu-kuó], no [estátu-kúo].
Se recuerda asimismo que, como el resto de las locuciones latinas, y de acuerdo con la última Ortografía, lo adecuado es escribirla en cursiva o, si no se puede usar este tipo de letra, entre comillas.