Las expresiones blanqueamiento, blanqueo o lavado deportivo son alternativas válidas a la voz inglesa sportswashing, que se utiliza para referirse a la utilización del deporte por parte de personas, países o instituciones para mejorar su imagen.
En los medios se ven con frecuencia frases como «De Cristiano Ronaldo a la conquista del golf: Arabia Saudí multiplica por cuatro el gasto en ‘sportwashing’», «Arabia Saudí, “campeón de sportwashing” o cómo desviar la atención de los derechos humanos con el deporte» o «Los Juegos Olímpicos de Berlín de 1936 y el Mundial de Fútbol de Italia de 1934, orquestados por Hitler, Goebbels y Mussolini, sirven como ejemplos históricos de sportswashing».
El sportswashing (también sportwashing), acrónimo inglés formado por sports (‘deportivo’) y whitewashing (‘encubrimiento’ o ‘lavado de imagen’), designa la práctica de blanquear la imagen o la reputación, normalmente de un país o una institución, por medio del deporte, ya sea adquiriendo jugadores o equipos, organizando encuentros deportivos o participando en ellos.
En español, sin embargo, se documentan ya las expresiones blanqueamiento/blanqueo deportivo o lavado deportivo (de imagen), que están bastante asentadas en el uso y resultan adecuadas.
Por ello, en los ejemplos anteriores habría sido preferible escribir «De Cristiano Ronaldo a la conquista del golf: Arabia Saudí multiplica por cuatro el gasto en blanqueamiento deportivo», «Arabia Saudí, “campeón de lavado deportivo de imagen” o cómo desviar la atención de los derechos humanos con el deporte» y «Los Juegos Olímpicos de Berlín de 1936 y el Mundial de Fútbol de Italia de 1934, orquestados por Hitler, Goebbels y Mussolini, sirven como ejemplos históricos de blanqueo deportivo».
Se recuerda que, si se desea utilizar el extranjerismo, lo apropiado es hacerlo en cursiva o entrecomillado cuando no se dispone de este tipo de letra.