Cuando se añade el prefijo sub- a un término que empieza por la letra b, la palabra resultante mantiene las dos bes.
Sin embargo, en la prensa se encuentran ejemplos como «Geológicamente, se encuentra asociado a la compleja zona de contacto bético-subético», «Suelos minerales de clima sub-boreal o templado frío con temperaturas medias anuales superiores a los 0 °C» o «La plataforma a nivel de la subrasante tendrá un ancho necesario para recibir sobre ella la capa o capas de la subase».
En español, tradicionalmente se han simplificado las consonantes dobles que surgen cuando se forma una palabra con la adición de un prefijo, como en trasudor, de tras- y sudor, o en transiberano, de trans- y siberiano, salvo en las combinaciones rr, nn, que siempre se han considerado válidas, como en superresistente o ennegrecer.
De acuerdo con la Ortografía de la lengua española, también se mantiene la doble b en los casos en los que el prefijo sub- se une a un término cuya primera letra es otra b, excepto en las voces asentadas subranquial y subrigadier, en las que sí se ha simplificado la doble consonante.
De esta forma, en los ejemplos anteriores lo indicado habría sido «Geológicamente, se encuentra asociado a la compleja zona de contacto bético-subbético», «Suelos minerales de clima subboreal o templado frío con temperaturas medias anuales superiores a los 0 °C» y «La plataforma a nivel de la subrasante tendrá un ancho necesario para recibir sobre ella la capa o capas de la subbase».
Se recuerda que no es apropiado el uso del guion (como sub-bético, sub-boreal o sub-base) pues, como norma general, los prefijos que se aplican a una palabra han de ir unidos a ella.