El término rickettsia hace alusión a una bacteria parásita que produce, entre otras alteraciones de la salud, tifus y fiebre, mientras que la palabra rickettsiosis designa cualquier enfermedad causada por tales bacterias, según recoge el Diccionario de términos médicos, de la Real Academia Nacional de Medicina de España.
En los medios de comunicación pueden verse frases como «La alcaldesa fumiga escuelas contra la riketsia», «Esta enfermedad, la rikettsia, puede ocasionar fuertes reacciones en los humanos» o «Un perro de siete meses abandonado lucha por recuperarse de riquetsia».
De acuerdo con los criterios de la Ortografía de la lengua española, rickettsia (de H. T. Ricketts, patólogo estadounidense que describió por primera vez estas bacterias) se escribe en cursiva, pues contiene la secuencia ck y dos tes seguidas, grafías ajenas al sistema ortográfico español.
Sin embargo, el sustantivo rickettsiosis se escribe sin resalte por tratarse de una voz derivada, igual que sucede con shakespeariano, brechtiano, jazzístico o pizzería, todas ellas recogidas en redonda en el Diccionario de la lengua española.
Aunque se testimonian adaptaciones como riketsia o riquetsia, ambas válidas, su uso es minoritario y el diccionario académico prefiere la grafía señalada.
Por último, cabe añadir que los nombres comunes de las bacterias se escriben en minúscula (rickettsia), mientras que en la denominación científica del género al que pertenecen se emplea mayúscula y cursiva (el género Rickettsia).
Así pues, en los ejemplos iniciales lo recomendable habría sido escribir «La alcaldesa fumiga escuelas contra la rickettsia», «Esta enfermedad, la rickettsiosis, puede ocasionar fuertes reacciones en los humanos» y «Un perro de siete meses abandonado lucha por recuperarse de rickettsiosis».