El verbo remover puede utilizarse para aludir a la destitución de alguien de su cargo o empleo.
En los medios es posible ver frases como «Veinticuatro de cuarenta diputados firmaron para removerlo de su cargo», «Ha decidido legal y legítimamente remover al presidente de su cargo» o «Dos vocales renunciaron y el presidente fue removido por inconsistencias en sus actuaciones».
Contrariamente a la creencia que se ha extendido sobre su mal uso, las numerosas definiciones incluidas en los principales diccionarios del español incluyen para el término remover el significado de ‘deponer o apartar a alguien de su empleo o destino’ o ‘destituir (a alguien) o apartar(lo) de su cargo’. De hecho, en el diccionario académico de 1817 ya aparecía remover como ‘deponer a alguno de su empleo o destino’.
De este modo, además de las acepciones usuales que se le atribuyen a ese verbo, como ‘pasar o mudar algo de un lugar a otro’ o ‘mover algo, agitándolo o dándole vueltas, generalmente para que sus distintos elementos se mezclen’, se encuentra la ya mencionada, por lo que los ejemplos anteriores son válidos.
Asimismo, el sustantivo derivado remoción es frecuentemente utilizado, sobre todo en el ámbito del derecho, para aludir a la ‘privación de cargo o empleo’ («Ecopetrol anuncia remoción en su cúpula administrativa»).