El punto y coma (;) separa unidades con sentido autónomo, ya sean grupos de palabras u oraciones completas, que a menudo incluyen sus propias comas.
En concreto, de acuerdo con las pautas de la última Ortografía de la lengua española y en lo que respecta a los usos periodísticos habituales, se recomienda emplear este signo en los siguientes dos casos:
– En enumeraciones: «Al acto también asistieron los siguientes ministros bolivianos: el de Exteriores, David Choquehuanca; el de la Presidencia, Juan Ramón Quintana; el de Comunicación, Amanda Dávila, y el de Transparencia y Lucha contra la Corrupción, Nardi Suxo». Como se ve, aunque no sería incorrecto mantener el punto y coma para separar a los dos últimos ministros, lo más recomendable para cerrar el inciso «Amanda Dávila» es emplear la coma antes de la conjunción y, indicio claro de que la enumeración concluye.
– Ante conectores, como sin embargo, así pues, en definitiva, por otra parte, por tanto…, cuando encabezan el segundo periodo: «El niño estuvo especialmente revoltoso; por tanto, después de pedirle mil veces por las buenas que dejara de gritar y saltar en el sofá, no es de extrañar que sus padres acabaran perdiendo la paciencia». Si se estima que las oraciones son muy largas, es posible sustituir el punto y coma por punto y seguido.