El elemento compositivo pan-, que se utiliza en la formación de nombres y adjetivos, nunca se escribe separado de estos por un guion.
Tomado del griego pan (‘todo’), entra en la formación de nombres y adjetivos con un sentido de totalidad o de conjunto, dando lugar, por ejemplo, a términos de uso cada vez más habitual en el lenguaje político y cultural, como panamericano, pangermánico, panafricano, paneslavo, panislamismo o panarabismo, junto a otros de uso menos frecuente, como pandemónium o pancromático.
Se escribe unido al nombre o adjetivo con el que forma un nuevo término, tal como indica la Ortografía académica, por lo que no resulta adecuado escribir, por ejemplo, *pan-árabe, *pan-hispánico o *pan-americano.