Donde, y no adonde o a donde, es el adverbio relativo adecuado para indicar el lugar en el que se ubica algo o alguien.
Sin embargo, a veces aparecen en los medios frases como estas: «Partió con rapidez ante el lobi, adonde lo esperaba la comitiva», «Fue instalado en la capilla ardiente, adonde fue recibido con largos minutos de aplausos» o «El plantel argentino arribó a la concentración, en las afueras de la ciudad, adonde lo esperaba un numeroso grupo de hinchas».
Se pueden emplear indistintamente adonde, a donde y donde con verbos de movimiento para aludir al destino de este («Llegó adonde / a donde / donde estaban ellos»), pero las dos primeras no son formas apropiadas en referencia a una ubicación, es decir, con el significado de ‘en donde’, para el que lo indicado es usar donde, opcionalmente introducido por en («Estaba donde / en donde debía»), como explica el Diccionario panhispánico de dudas.
Por tanto, en los ejemplos del principio, con los que se habla de un lugar en el que se espera y se recibe a alguien, lo indicado habría sido escribir «Partió con rapidez ante el lobi, donde lo esperaba la comitiva», «Fue instalado en la capilla ardiente, en donde fue recibido con largos minutos de aplausos» y «El plantel argentino arribó a la concentración, en las afueras de la ciudad, donde lo esperaba un numeroso grupo de hinchas».

