La voz metaverso, que se emplea en diversos ámbitos para referirse a mundos virtuales o alternativos, está bien formada y su uso es adecuado.
En los medios de comunicación se pueden encontrar ejemplos como los siguientes: «Todavía no se sabe cómo serán los metaversos que diseñan las grandes tecnológicas», «Tendrá su propio metaverso, un universo virtual alternativo lleno de personajes, mundos y elementos de sus licencias» o «Stephenson concibió el metaverso en su novela de 1992 Snow Crash».
Aunque la palabra haya llegado del inglés metaverse, la adaptación metaverso es también una creación válida en español, con el elemento meta-, que tiene entre otros sentidos el de ‘después de’, y la terminación -⁠verso de universo. Tal como explica el diccionario de Oxford, es un término coloquial utilizado para describir una representación de la realidad llevada a cabo mediante programas de realidad virtual.
La terminación -verso también se emplea para hacer referencia a los universos basados en entornos virtuales, como criptoverso (de las criptomonedas), o a mundos alternativos de fantasía, como bativerso (de Batman) y spiderverso (de Spiderman), a los cuales se les aplica también, de modo genérico, el nombre de metaverso. En ciencias y otros ámbitos, multiverso alude a la posible existencia de múltiples universos paralelos.
Por ello, los ejemplos anteriores pueden considerarse apropiados.