El verbo detentar significa ‘poseer o retener algo, especialmente un título o cargo, ilegítimamente’.
Por lo tanto, no es recomendable emplearlo, como frecuentemente se hace, para referirse a una persona que ejerce algún poder o cargo conseguido de manera legítima, ni como sinónimo de alcanzar, ejercer, llegar a, desempeñar, etc.
Es apropiado en frases como «Los militares detentaron el poder después del golpe de Estado»; pero no en oraciones como «Se espera que ese candidato sea el que detente la presidencia del Gobierno», donde lo correcto habría sido: «Se espera que ese candidato sea el que alcance la presidencia del Gobierno».
Conviene tener en cuenta que, tal y como se explica en el Diccionario panhispánico de dudas, aunque en el lenguaje jurídico-administrativo es frecuente utilizar detentar con los sentidos generales de ‘tener [algo] o disponer [de ello]’ o ‘poseer [un título o dignidad] u ocupar [un cargo]’, se recomienda reservar su uso a los casos en que la posesión se considera ilegítima.