Arancel es el término usado habitualmente para referirse al gravamen aplicado por un Estado a las mercancías que cruzan su frontera, especialmente a las importaciones.
En los medios de comunicación se pueden ver frases como las siguientes: «La Unión Europea está negociando las nuevas tarifas», «¿A qué sectores europeos afectarán las tarifas de Trump? o «Las acciones que más sufrirán por las tarifas de China».
Tal como se recoge en el Diccionario de la lengua española, arancel es una ‘tarifa oficial determinante de los derechos que se han de pagar en varios servicios, como el de costas judiciales, aduanas, etc., o establecida para remunerar a ciertos profesionales’. Así, es el sustantivo más comúnmente empleado en el ámbito de las importaciones y las exportaciones para aludir a ese tipo concreto de tarifas, por lo que resulta más preciso optar por él en estos contextos.
Así pues, en los ejemplos iniciales, que se refieren a esta cuestión, lo más recomendable habría sido escribir «La Unión Europea está negociando los nuevos aranceles», «¿A qué sectores europeos afectarán los aranceles de Trump? y «Las acciones que más sufrirán por los aranceles de China».
Por otro lado, se recuerda que los nombres de tipos aranceles se escriben con minúsculas iniciales por ser denominaciones comunes y meramente descriptivas: arancel cero.

