Estos términos no son sinónimos, por lo que no es adecuado emplearlos indistintamente.
Según el diccionario académico, ilegal es lo contrario a la ley y alegal es lo no regulado ni prohibido, es decir, lo que funciona sin haber sido reglamentado legalmente.
Sin embargo, en lo medios de comunicación se encuentran frases como: «Detenidos por una plantación alegal de cannabis en una casa a las afueras de Madrid»; en este caso, lo apropiado habría sido emplear ilegal puesto que las plantaciones de cannabis están prohibidas en España.