Alá, con una sola ele y sin hache, es la escritura recomendada del nombre con el que se suele llamar a Dios en la cultura musulmana.
En las noticias relacionadas con el mundo islámico, sin embargo, se pueden encontrar otras grafías, como por ejemplo en «Una leyenda cuenta que el profeta fue enviado allí por Allah», «En el islam se tiene la firme creencia de que el ser humano es la creación de Al-lah» o «Representa la presencia de Alah en el templo».
Alá es la forma en la que tradicionalmente se ha escrito este nombre en español, que incluso estuvo registrada en el diccionario académico hasta la edición de 1992. Como la hache final no se pronuncia y el dígrafo ll representa un sonido distinto de la letra l, son desaconsejables transcripciones como Alah, Allah, Allâh o Al-lah.
Por ello, en los ejemplos anteriores habría sido más adecuado escribir «Una leyenda cuenta que el profeta fue enviado allí por Alá», «En el islam se tiene la firme creencia de que el ser humano es la creación de Alá» y «Representa la presencia de Alá en el templo».
Una primera versión de esta recomendación se publicó el 4 de febrero del 2011.