Los sustantivos absentismo y ausentismo son igualmente adecuados y significan lo mismo.
En los medios de comunicación se pueden encontrar titulares como los siguientes: «El estrés, principal causa de ausentismo laboral», «La crisis reduce por primera vez en 10 años el absentismo laboral».
Se emplean en ellos dos formas diferentes para referirse a una misma realidad: la falta de asistencia a un lugar donde se ejerce una obligación, en este caso el trabajo. Ambas están recogidas en el Diccionario de la Real Academia Española y resultan igualmente recomendables. En el español de América se usa más comúnmente la forma ausentismo, que viene del adjetivo ausente; en España se prefiere absentismo.