La construcción a contrapié se escribe en dos palabras, y no es apropiada la forma a contra pie.
No obstante, pueden encontrarse frases como estas en algunos medios de comunicación: «El despido del entrenador pilló a contra pie a todos», «En ese escenario, la UE ha quedado a contra pie» o «El disparo, que pillaba a contra pie al portero, fue desviado gracias a una mano espectacular».
La expresión que significa ‘en posición forzada o con el pie cambiado’, y que también se usa en sentido figurado, es a contrapié, escrita en dos palabras y con tilde en el último término, tal como indica el Diccionario panhispánico de dudas. No resulta adecuada, en cambio, la grafía a contra pie, escrita en tres palabras.
Se recuerda que, aunque la palabra pie no tiene tilde por ser monosílaba, sí la lleva contrapié, pues es aguda terminada en vocal.
Por tanto, en los ejemplos, lo apropiado habría sido «El despido del entrenador pilló a contrapié a todos», «En ese escenario, la UE ha quedado a contrapié» y «El disparo, que pillaba a contrapié al portero, fue desviado gracias a una mano espectacular».

