La palabra samba es, en su uso más general, femenina (la samba), pero también es frecuente y adecuado su uso masculino (el samba).
En los medios de comunicación se leen frases como «Aparece el ‘príncipe de la samba’», «La hora de los tablados y el samba» o «El sabor del samba llenó de danza la noche en 18».
El Diccionario de la lengua española define samba como ‘danza popular brasileña, de influencia africana, cantada, de compás binario’ o también como ‘música con que se acompaña la samba’.
En esa obra aparece como sustantivo femenino, aunque con la aclaración de que en algunos lugares de América (Argentina o Cuba, entre otros), se emplea como masculino, pues toma el género de su forma original portuguesa.
De este modo, los tres ejemplos iniciales son adecuados.
Se recuerda además que, como indica el Diccionario panhispánico de dudas, samba no debe confundirse con zamba, que es una ‘danza cantada típica de la Argentina’.