Tanto Sareb como SAREB son grafías adecuadas del acrónimo de Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria.
En las noticias se pueden ver ejemplos como estos: «El banco malo se llamará SAREB y tendrá entre 85 000 y 90 000 millones de euros en activos» o «Dichas entidades privadas suscribirán en las próximas semanas deuda subordinada emitida por la Sareb».
Un acrónimo es, por un lado, el término formado por la unión de elementos de dos o más palabras (como teleñeco, de ‘televisión’ y ‘muñeco’) y, por otro, la sigla que se pronuncia como una palabra: OTAN. De acuerdo con la Ortografía de la lengua española, en este último caso, los acrónimos —escritos enteramente con mayúsculas— que se corresponden con un nombre propio y tienen más de cuatro letras pueden escribirse solo con inicial mayúscula: SAREB, Sareb.
Por ello, los ejemplos anteriores son apropiados.
Se recuerda que el desarrollo del nombre se escribe con mayúscula en los sustantivos y adjetivos, pues es un nombre propio: Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria.
Asimismo, la denominación banco malo, que es una alternativa adecuada al anglicismo bad bank, no necesita comillas ni cursiva.