A contraluz, en dos palabras, es la grafía apropiada de la locución empleada para lo que se sitúa de espaldas a la luz, y no a contra luz.
Sin embargo, en la prensa a veces se ve esta última forma: «En la fotografía se le puede ver posando de espaldas, a contra luz», «No hace falta irse muy lejos para fotografiar uno de los atardeceres más mágicos a contra luz» o «En la primera imagen, miran a la cámara, a contra luz, a su paso por un campo de fútbol».
El diccionario académico recoge la expresión a contraluz, con el segundo elemento en una sola palabra y sin guion (no a contra-luz), con el sentido de ‘estando lo que se mira situado de espaldas a la luz’. Por ello, como explica el Diccionario panhispánico de dudas, lo adecuado es escribirla así y no en tres palabras.
En consecuencia, en los ejemplos lo indicado habría sido «En la fotografía se le puede ver posando de espaldas, a contraluz», «No hace falta irse muy lejos para fotografiar uno de los atardeceres más mágicos a contraluz» y «En la primera imagen, miran a la cámara, a contraluz, a su paso por un campo de fútbol».
También es válida, aunque menos frecuente, la variante al contraluz: «Al contraluz, la cifra que sale debajo del motivo principal se volverá oscura primero».
Ver también
➤ el contraluz / la contraluz (consulta)
