Antes de pronunciar la conferencia Realidad, ficción y posverdad, organizada por la Fundación Barrié en A Coruña, el académico ha señalado que esa creencia extendida «nace de la sustitución de la realidad por otra cosa que cae sobre nosotros continuamente».
«Miren en el diccionario, es muy fácil, ahora está en línea, se puede ver en los teléfonos… No existe», ha zanjado.
La pasada semana el diccionario de la RAE incorporó 3 345 modificaciones entre cambios, supresiones y novedades, entre ellas, la introducción de los términos buenismo, postureo, posverdad y aporofobia.
El diccionario define como posverdad la «distorsión deliberada de una realidad que manipula creencias y emociones con el fin de influir en la opinión pública y en actitudes sociales».
Preguntado hoy en A Coruña por la diferencia entre posverdad y mentira, el director de la RAE ha reconocido que hay gente que piensa que el significado de posverdad está recogido en el significado de mentira, si bien ha dicho que existen «muchos matices entre una mentira pura y lo que ahora llamamos posverdad».
«Hay una serie de componentes distintivos muy interesantes. Este neologismo es muy útil, da mucho que pensar sobre las circunstancias específicas de nuestra sociedad actual», ha dicho.
Villanueva ha explicado que «hay muchos antecedentes» de lo que hoy se conoce como posverdad, que tienen que ver con la proliferación comunicativa que hoy existe, la influencia de los medios de comunicación y también de las redes sociales.
«Y con algo antiguo: la demagogia. Con la utilización de expresiones por parte de quien tiene el poder para que el público en general acabe entrando por el aro, acabe aceptando lo que ellos quieren», ha sostenido.
Ha insistido, en cualquier caso, en que a pesar de que el término posverdad se puso de moda el año pasado tras ser elegido por el Diccionario de Oxford como palabra del año en inglés (post-truth), «en castellano hay registros con el uso que se le da hoy desde 2004».
Por lo tanto, ha afirmado, «no es innovación de última hora adoptada por la influencia del inglés».