«Para nosotros es muy importante sumarnos a la convocatoria de la UE y celebrar la diversidad lingüística porque creemos que es fundamental», dijo a Efe el director del Instituto Cervantes, Luis García Montero.
«En primer lugar, es una forma de respetar los Derechos Humanos. Las lenguas maternas son fundamentales porque las personas hemos aprendido a decir “tengo frío”, “tengo miedo” o “soy yo” en nuestra lengua y nuestra lengua forma parte de nuestra identidad y no hay respeto a una persona que no pase por el respeto a su lengua», agregó.
La idea central del acto en la capital alemana es mostrar la diversidad como una riqueza y no como una anomalía y resaltar también cómo las lenguas de enriquecen unas a otras.
«Todas las lenguas están en contacto, ninguna lengua es una lengua aislada, todas se enriquecen mutuamente y hoy somos testigos de ello con las lenguas históricas de nuestros territorios y las lenguas que vienen de fuera. Es bueno que estén en contacto y que aprendan las unas de las otras», dijo la directora del Instituto Etxepare, Irena Larraza.
García Montero puso el ejemplo del surgimiento del español en un ámbito de habla euskera como un caso en el que, por necesidades de comunicación, las lenguas se enriquecen unas a otras.
«El español nació en un ámbito de lengua euskera en el que el latín evolucionó y evolucionó porque los hablantes en euskera debían entenderse con los leoneses, con los catalanes, con los castellanos», señaló.
«A partir de ahí su avance se basó en la asimilación de otros idiomas, por ejemplo el árabe, hay miles de palabras árabes en español y luego cuando pasó a América también recogió palabras de idiomas americano», agregó.
Lo normal, según García Montero, debería ser el diálogo enriquecedor entre las lenguas y puso como ejemplo sus comienzos como poeta en el que tuvo relaciones con poetas que escribían en catalán, como Alex Susana, en gallego, como Ramiro Fonte, o euskera, como Bernardo Atxaga.
«Lo que me parece muy raro es que haya nacionalismos ofensivos. Nacionalismos españolistas que ofenden al catalán, al gallego o al euskera o nacionalismos de territorios bilingües que ofenden al español», dijo.
«Para mí, por ejemplo, cada vez que un dirigente catalán dice que prefiere que en los ámbitos económicos de Cataluña se hable inglés como lengua vehicular en vez de español me parece un absoluto disparate, pues empobrece la verdadera identidad de los catalanes, de los gallegos y de los vascos que tienen una gran riqueza por su bilingüismo», agregó.
La presidenta del Consello da la Cultura Galega, Rosario Álvarez, dijo que la idea central era que los representantes de las distintas instituciones salieran «a la palestra pública para mostrar que la diversidad lingüística de España no es una anomalía sino una riqueza».
«Es además una normalidad que también se da en toda Europa porque Europa es un continente que tiene entre sus características básicas justamente esta gran pluralidad de lenguas y de culturas», subrayó.
«Europa es la cuna de cinco de los diez idiomas más hablados del planeta y es un continente que si quitamos Islandia y en cierto modo Portugal, pero no del todo, ningún país es monolingüe y en ningún país las lenguas coinciden con los límites de los estados», añadió.
El Instituto Cervantes, según explicó García Montero, ya había celebrado el día de las lenguas europeas, el año pasado en París y hace dos años en Bruselas, pero el acto de hoy tiene un carácter de novedad tras un acuerdo firmado con todas las instituciones que se dedican a difundir y ensañar las lenguas del estado español.