El español tiene un amplio desarrollo en poesía, teatro y narrativa, y en teología, pero sólo en los últimos decenios posee «filosofía propia», es decir, un pensamiento radical, original, auténtico, sin importar sus temas, sino el método y el rigor con el que se examinan los asuntos de que trate, explicó.
En el marco de su reciente investidura como doctor honoris causa por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el poeta, periodista y ensayista dictó la conferencia Filosofía y Lengua. Pensar en español, y destacó que se puede y se debe pensar en esa lengua, que debemos considerar matriz, es decir, en la que concebimos palabras a las que semantizamos (le damos significado) de manera creativa.
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