Se refirió al término cantinflesco, que se incluye en el Diccionario de la Real Academia Española y que fue creada por Cantinflas, prototipo del actor mexicano Mario Moreno, quien a pesar de hablar mucho, simplemente no decía nada.
En entrevista con Notimex, Argüelles abundó que el disparate y el barbarismo provienen de la falsa idea de que todo lo que decimos es verdad, y por eso no dudamos de lo que hablamos o escribimos.
«Lo que necesitamos es un espíritu crítico que incluya la autocrítica; en el habla las equivocaciones son más constantes que en la escritura, a pesar de existir los diccionarios», sostuvo.
El poeta y conocedor de la lengua española añadió que todos los idiomas están compuestos por préstamos de otros idiomas, pero éstos deben ser tomados por una lengua cuando en ella no existe la palabra adecuada para definir una nueva realidad, un nuevo concepto o artículo. Ejemplo de lo anterior es que ya existe en español el verbo tuitear y el sustantivo tuitero.
Leer más en terra.com