El jurado ha destacado también su labor divulgativa en conferencias, programas de radio, libros y otras publicaciones.
Además, los miembros de este jurado han resaltado «su papel en la creación de la Fundación del Español Urgente (Fundéu), durante su presidencia de la Agencia EFE», que ostentó entre 2004 y 2012.
Entre los galardonados en esta categoría de Ciencias Sociales y Humanidades de los Premios Castilla y León se encuentran Enrique Tierno Galván, Joaquín Díaz, Víctor García de la Concha, Germán Sánchez Ruipérez, Luis Díaz de Viana, José Manuel Ruiz Asencio y Araceli Mangas Martín, entre otros.
El jurado ha estado compuesto por José Manuel Ruiz, catedrático de Paleografía de la Universidad de Valladolid y premio de Ciencias Sociales y Humanidades 2016; Félix Martínez, catedrático de Historia del Derecho de la Universidad de Valladolid; Nuria Belloso, catedrática de Filosofía del Derecho de la Universidad de Burgos; Luis Miguel Torres, director de ICAL; Ruth Rodríguez, directora de RTVE Castilla y León, y Carlos Travesí como secretario del jurado.
Grijelmo cree que las noticias perderán “alma” con la inteligencia artificial
En declaraciones a la agencia Efe, que dirigió entre 2004 y 2012, Grijelmo ha opinado este miércoles que, aunque la aplicación de la inteligencia artificial en los medios puede ser útil para noticias de urgencia o de datos, su uso producirá informaciones sin «alma» y un periodismo «plano» y resultará «nefasta» para aquellos medios que procuran brindar al lector el placer de la lectura.
«Algo elaborado por un robot no creo que proporcione sensación de agrado», ha declarado el periodista, que cuenta con una decena de publicaciones centradas en el buen uso del idioma y la gramática, un tema que también centra su última novela, El cazador de estilemas, de la que se prepara ya una nueva edición.
Sin embargo, ha reconocido cierta utilidad en el caso de noticias de urgencia o en aquellas en las que lo importante son los datos, pero su uso generalizado provocará informaciones muy parecidas en detrimento del estilo de los periodistas y de los medios, advierte.
Ha indicado que los «mal llamados teléfonos inteligentes» aprenden de lo que escriben millones de personas pero puede ocurrir que muchas escriban algo mal y que el teléfono lo interprete como bueno: «es un tema apasionante porque cómo escribe la mayoría de la gente influye en la evolución del idioma», remarca.
Sobre los retos a los que se enfrentan los periodistas en el uso del lenguaje, Grijelmo ha indicado que el principal es conseguir una expresión clara, lograr pensar en los lectores y no utilizar palabras técnicas o rimbombantes que «nos separan de la gente».
Ha opinado que existe un interés creciente por la lengua y la divulgación lingüística, como demuestran las buenas ventas que cosechan títulos de esta materia, y ha indicado que el reto es lograr explicar materias difíciles desde la sencillez y sin faltar al rigor.
El periodista y escritor se ha mostrado muy sorprendido por su distinción con el premio Castilla y León de las Ciencias Sociales y Humanidades, algo que “no estaba en su horizonte”, y ha recordado a los grandes filólogos y lingüistas a los que admira y que le han precedido en el galardón. «Es una relación de ganadores que te hace sentir un poco pequeño a su lado, pero a la vez muy feliz de estar en esta lista», ha declarado.