El director de la institución, Luis García Montero, ha puesto de relieve la importancia del turismo en la labor del Instituto Cervantes: «Nuestro trabajo más que enseñar un vocabulario, es hacer una invitación de hospitalidad y de despertar la curiosidad de conocer nuestros pueblos, nuestras costas y nuestro trabajo».
Quinientos millones de personas hablan español en el mundo, una lengua «muy variada» y rica en acentos y características: «Somos conscientes de que para enseñar español tenemos que conocernos e invitarnos a viajar por nuestros países».
«El ocio es importante, el entretenimiento también —ha añadido—, pero lo que llega al fondo de nuestra alma es la comprensión del espíritu que compartimos».
La pandemia ha afectado al turismo como a ningún otro sector; por eso, el Instituto Cervantes se ha comprometido a facilitar que el sector «resurja y se consolide con la mayor fuerza posible», especialmente en el trabajo con las academias de lengua española que desarrollan su actividad en todo el mundo.
«Muchas gracias por este premio», ha dicho García Montero, que ha asumido como objetivo del Cervantes el convertirse en «una invitación para visitar a España» a los alumnos que aprenden español en todos los centros del mundo.
Fitur es la feria más importante del mundo de turismo y Skal es una organización internacional, creada en 1932 en París, que promueve las sinergias entre profesionales dedicados al turismo.