La incorporación de estas palabras en el DHLE no supone un aval para su uso, sino únicamente la constatación de que se atestiguan o se han atestiguado en español (tal como muestra la documentación allegada en cada artículo); tampoco implica en ningún caso que se esté considerando su inclusión en el Diccionario de la lengua española (DLE), repertorio que, como se indica en su presentación, es «la obra lexicográfica académica por excelencia» que, a lo largo de la historia, no acoge neologismos de uso no generalizado.
Las voces y acepciones incorporadas al DLE son las aprobadas por la Real Academia Española.