Pero el Gobierno de aquel país decidió recuperar la denominación primitiva Myanma, con el añadido de una erre (Myanmar), por diversas razones étnicas, fonéticas y políticas.
La Academia recogía en su Diccionario de 2001 la palabra birmano como gentilicio correspondiente a Birmania, y aclaraba: «hoy Myanmar». Sin embargo, la edición de 2014 y la Ortografía de 2010 (apéndice de topónimos) eliminaron este segundo nombre (pese a ser reconocido ya por la ONU) para elegir en exclusiva el que estuvo vigente hasta que el Gobierno militar lo cambió en 1989.
Se han manejado argumentos válidos para defender Birmania y también para preferir Myanmar (o su adaptación Mianmar, con i).
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