Lo genial de utilizar este extranjerismo es que preguntas su significado y la mayoría de los hablantes se quedan como sábanas de fantasma sometidas al poder de Vanish Oxi Action: en blanco. Y de eso justo se trata: ¿para qué recurrir a giros en español pudiendo adoptar términos foráneos que generan incomprensión? ¡Acojamos en nuestro seno ghosting y el asimismo imprescindible ghostear!

Otros usuarios del idioma, todo hay que decirlo, demuestran erudición y aclaran que ghosting hace referencia al hecho de romper una relación, especialmente sentimental, cortando toda comunicación con la persona a la que se abandona. Y nada de poco a poco, para ir dando pistas del distanciamiento, sino de forma súbita y sin explicaciones, porque sí. Un día te da un aire y, total, ¿para qué tener una conversación cara a cara con alguien por quien se supone que has sentido afecto? Mucho mejor dejar de contestar sus llamadas, sus wasaps y sus mensajes, y que el otro arree con el desconcierto. No me negaréis que, aparte de cobardón, resulta un tanto esquizo.

Peeeero: las buenas noticias no acaban aquí. Con un sentido muy relacionado, también hay quien asocia ghosting con bloquear a un antiguo contacto o amigo, de manera que lo que este escribe deja de aparecer en tu monitor. Si esta práctica se lleva a cabo en comandita, el muro de silencio se convierte en castillo insonorizado y el afectado se queda hablando a solas contra las paredes, víctima de quienes han convenido en hacerle el vacío.

¡Ah! Que no se nos olvide que todavía hay quienes oyen ghosting y piensan en cierto efecto que se produce en las pantallas de los móviles y los televisores. Y otros se imaginan que se trata de espiar la partida de un oponente en una competición de videojuegos.

Maravilloso carajal, como se aprecia, a juzgar por las respuestas de nuestros usuarios de Twitter y Facebook.

Ellos mismos nos proporcionan infinidad de soluciones: si se utiliza ghosting para romper una relación sin despedirte, nada como escoger esfumarsedesaparecerborrarse del mapa. También gusta fantasmear, aunque se llama fantasma a la persona envanecida y podría interpretarse como ‘presumido’. Y muchos sostienen que equivale a hacer bomba de humo tirar la de humo, si bien eso es hacer mutis por el foro en una fiesta concreta, aunque luego se retoma el contacto con los amigos de los que uno se ha despedido a la francesa. ¿Podría traducirse como cortar romper a la francesa? En México y en Colombia, está asentado dejar en visto a una persona. 

Si lo que se describe es el ostracismo al que se condena a una persona, que es el otro uso mayoritario en las noticias, se apuesta por ignorarningunearbloquear hacer el vacío.

Esto del ghosting, que sirve para todo y te acuchilla el idioma cual navaja multiusos, es hasta ahora lenguaje periodiqués. Por el momento, no irrumpe en el lenguaje oral ni nos sale con naturalidad, ¡una verdadera pity!

Así que insisto: fomentemos este joyón. Tiene pinta de que ha llegado para quedarse y, con suerte, nos hará olvidar todos los equivalentes castizos. Se me ocurre —llamadme loco— que, si consolidamos este anglicismo para referirnos al distanciamiento sin explicaciones de un pusilánime cuya pasión se ha difuminado, no tardaremos en proclamar que La Gioconda se pintó no aplicando el esfumado, sino con la técnica del ghosting. ¡Eso es arte!