En ella, nuestro director general defiende la fórmula de rigor con simpatía que ha hecho de la Fundación del Español Urgente que dirige un referente: «No somos talibanes», asegura.

Explica el funcionamiento de la institución y alerta no solo sobre la avalancha de anglicismos («fuente de enriquecimiento, siempre que se empleen bien») sino sobre «la fragmentación y la dispersión del idioma en su peregrinaje por las vastas llanuras de Internet. El inglés manda en todos los ámbitos de conocimiento, tanto en la nomenclatura de las cosas como en la difusión de las ideas. De ahí que la precisión y el rigor sean fundamentales».

Puedes leer la entrevista completa en este enlace.