Tanto el tono como el volumen son aspectos importantes en la narración audiovisual. La correcta selección del color de la voz del narrador y el tono de lo narrado marcan la diferencia en un producto audiovisual digital y le otorgan características propias.
Por ello, respecto del tono se aconseja que:
- El uso del tono de la narración sea pausado, si se quiere comunicar con claridad hay que vocalizar correctamente. Esto es importante ya que a priori no sabemos qué dispositivo de sonido tendrá el usuario y, por lo tanto, la vocalización es vital para homogeneizar el discurso e intentar dar claridad al mismo independientemente del dispositivo final en el que se escuche.
- El color o timbre de voz del narrador queda a elección del desarrollador de la web y de su buen hacer, en cualquier caso de lo que se trata es de saber complementar el color de la voz y el producto.
En el caso del volumen del audio:
- No deben usarse volúmenes estridentes. Dan mala imagen a la marca o producto que representan. Sobre todo hay que controlar el volumen del audio al cargar la página por primera vez. Además, crea tensión y rechazo entrar en un sitio web y que automáticamente salte un audio a un volumen alto. Para solventar esto aconsejamos programar el sonido con un incremento paulatino de volumen (Fade in).
- No hay que olvidarse de darle siempre al usuario la posibilidad de desactivar el sonido.
- Reservar el uso de sonidos estridentes y volúmenes máximos para casos de emergencia.
- No publicar, si no es estrictamente necesario, audios defectuosos, de baja calidad o ilegibles ya que repercute muy negativamente en el producto y la marca.