Puede pensarse en dos posibles adaptaciones: si se toma como base directamente el griego moderno, la transcripción apropiada es Kárpazos (con zeta, pues esa es su pronunciación), pero también puede optarse por una transcripción clásica a través del latín, que daría Cárpatos, forma esta última que ha tenido cierto uso. Antaño fue también habitual emplear el nombre italiano de Scarpanto, pero esta forma se desaconseja, al igual que adaptaciones híbridas como Kárpatos.
La forma Karpathos no es una adaptación adecuada al español.